Efectivos de la Sección Ecológica de la Policía Comunitaria realizaron un procedimiento en las últimas horas en una casa donde funcionaba un templo del rito umbanda y donde estaba todo listo para sacrificar una oveja, gallinas y palomas, algo que está penalizado por la ley nacional de protección de los animales.
El procedimiento se realizó en la tarde del jueves en Navarro al 5800, en barrio Ludueña Sur. Según fuentes policiales, los agentes llegaron hasta ese lugar luego de recibir denuncias de que allí se realizaba un ritual de la religión umbanda.
Al presentarse en el lugar, la dueña del inmueble, al ser informada sobre la presencia de la policía, permitió la realización de una inspección de su casa. Así se estableció que la vivienda estaba ambientada y preparada para la realización de una ceremonia umbanda, con comida, flores, velas encendidas, fuentes con agua y varios cuchillos.
Voceos oficiales indicaron que en el lugar, además de la dueña, había otras siete personas, todas vestidas con indumentaria de color blanco. Según fuentes policiales, la propietaria del lugar admitió que tenía animales que serían sacrificados de acuerdo a los rituales de esa religión. Los policías le informaron que esa acción va en contra de la ley nacional 14.346.
Esa normativa establece en su artículo 1º que “será reprimido con prisión de quince días a un año, el que infligiere malos tratos o hiciere víctima de actos de crueldad a los animales”. Además, en el artículo 2º la ley señala que “serán considerados actos de maltrato: no alimentar en cantidad y calidad suficiente a los animales domésticos o cautivos, y azuzarlos para el trabajo mediante instrumentos que, no siendo de simple estímulo, les provoquen innecesarios castigos o sensaciones dolorosas”.
Los animales que estaban en la casa de calle Navarro (una oveja, cuatro gallinas, cinco gallos y dos palomas blancas) fueron puestos a resguardo de la Policía Ecológica y se procedió a la identificación de las personas que estaban en el lugar, pero no hubo detenidos, según trascendió.