La posibilidad de una reforma previsional en la provincia de Santa Fe generó un notable aumento en los trámites jubilatorios. En abril de 2024, se registraron 518 solicitudes, casi el doble de las realizadas en el mismo mes de 2023. Ante esta situación, el gobierno provincial intentó calmar las preocupaciones pero también subrayó la necesidad de implementar cambios para estabilizar el sistema de pensiones.
“Tranquilos todos. El gobernador reiteró en numerosas ocasiones que seguirá defendiendo la Caja en el ámbito provincial. Hay que desmentir ese rumor infundado que afirma que el gobierno planea transferirla a la Nación, como hicieron 11 provincias durante la época de Menem. La decisión política es mantenerla bajo la jurisdicción de la provincia”, explicó Jorge Boasso, secretario de la Seguridad Social de Santa Fe.
El ex concejal de Rosario también enfatizó que la política del Ejecutivo es conservar el sistema de reparto. “Para aquellos que afirman que se adoptará un sistema de capitalización, no es cierto. La postura del gobernador fue muy clara en este aspecto, así como en la garantía de respetar los derechos de proporcionalidad y sustitución de los haberes en relación con los salarios”, añadió Boasso.
A pesar de esto, Boasso señaló que es imprescindible aplicar una serie de reformas al sistema. “No se puede seguir jubilando a las personas a los 53 o 54 años porque ya no son ancianos”, afirmó.
El debate sobre la reforma previsional también se está llevando a cabo en el ámbito legislativo. Hace unas semanas, el Senado provincial aprobó la creación de una comisión para discutir y analizar la situación de la caja de jubilaciones de Santa Fe y proponer posibles modificaciones. Sin embargo, el tema se estancó en la Cámara de Diputados, donde aún no se alcanzó consenso.
