Los crímenes y las balaceras se suceden en Rosario como parte del lamentable paisaje urbano que tiene la ciudad. Es muy difícil explicar la violencia que toma cada capítulo de la crónica policial en la actualidad, pero justamente la serie Narcos, disponible en Netflix, puede traer un poco de claridad sobre el eje de la cuestión: el mundo del narcotráfico.
¿Cómo se hace para explicar una balacera? Como ejercicio de una clase sobre seguridad, podemos poner el eje en la serie Narcos, una excelente producción de Netflix que a base de una narrativa brillante, nos sumerge en el mundo del narcotráfico, mostrando el comienzo desde cero y el posterior crecimiento de Pablo Escobar en Medellín.
La trama es simple, y de hecho conocida por muchas personas, ya que está basado en un caso real: Pablo Escobar se dedicaba al tráfico de distintas mercancías mediante una red de corrupción que le permitían manejar distintos “cargamentos” por vía terrestre, hasta que “le proponen un negocio” por el crecimiento de la demanda de cocaína en Estados Unidos. Así que uno tiene el producto, el otro la logística, y existe una gran demanda para el mismo. El único detalle, es que el negocio por donde se lo mire es ilegal, pero genera ingresos millonarios.
Sin lugar a dudas, el primer gran pie del narcotráfico consiste en la demanda, y con la red que va generando Pablo Escobar, lo que podemos ver en la serie es los millones de dólares que en muy poco tiempo logra generar el narcotráfico. Millones de divisas que hacen que existan nuevos actores que pasen a ser parte del negocio, lo que justamente trae aparejada la codicia por quedarse con todo el negocio. De esta manera, las balas entran en escena, ya que al ser un negocio ilegal, los problemas entre narcos, se arreglan a balazos. Detrás el Gobierno, la policía y la justicia intentando hacer lo suyo, pero con el problema de que al narcotráfico si algo le sobra es plata a la hora de repartir sobornos, y balas a la hora de dar mensajes.
Un detalle para tener en cuenta, en la serie Narcos de Netflix vamos a ver cosas increíbles, pero todo es basado en hechos reales… algunos muy similares a los de las crónicas policiales que se dan actualmente en Rosario.