Familiares y víctimas de la inseguridad y la violencia en Rosario fueron recibidos por el ministro de Seguridad Claudio Brilloni en Gobernación, aunque expresaron que el acampe no se moverá hasta que se convoque a una mesa de diálogo con el intendente Pablo Javkin, el gobernador Omar Perotti, legisladores provinciales y nacionales, y representantes de la Justicia.
Ana María, la mamá de Sebastián “Oso” Cejas, contó en el programa Cada Día (El Tres) que no esperaban la reunión con el ministro y que se fueron “con sabor a nada” porque el objetivo, al margen del encuentro con Brilloni, es sentarse junto a los funcionarios de los diferentes niveles y poderes del Estado para pedirles “que dejen de tirarse la pelota” unos a otros.
En el mismo tono se pronunció otro de los presentes en el acampe, Ezequiel Lowden, al remarcar que convocan “a todo el arco político” para ser escuchados y lograr “un acuerdo político y social” para abordar con seriedad y compromiso la crisis de violencia e inseguridad en la región.
“No levantamos el acampe hasta que no se tomen medidas y tengamos una respuesta”, afirmó. Además, anticipó que no descartan encadenarse al edificio de Gobernación y que a las 20 volverán a encender velas, tal como lo hicieron el lunes por la noche en el inicio de la convocatoria a la que denominaron “Iluminamos Rosario”.
El lunes comenzaron una nueva manifestación para volver sobre sus reclamos, con velas y un acampe frente a la gobernación provincial, donde avisaron que van a encadenarse si no tienen respuestas. Pasaron toda la noche frente al edificio de Santa Fe y Dorrego y este martes siguen en el lugar.
“El reclamo es que nos atiendan los funcionarios, Perotti, Javkin, el Concejo, en septiembre presentamos un petitorio en el Concejo, nadie se quiere hacer cargo de nada, vamos a tomar las medidas necesarias”, expresó Andrea, hermana de Sandra López, una comerciante asesinada el 14 de abril del año pasado.