Este martes se llevó a cabo en el Centro de Justicia Penal de Rosario la audiencia preliminar en la causa por el homicidio de Ivana Garcilazo, la joven de 33 años que murió tras recibir un piedrazo mientras regresaba en moto del clásico entre Rosario Central y Newells en 2023, donde se puso fecha para el juicio oral y se prorrogó la prisión preventiva para los acusados.
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El juez aceptó la acusación completa presentada por el fiscal Lisandro Artacho, que sostiene que Damián Reifenstuel, Ariel Cabrera y Juan José “Tuerca” Massón actuaron de forma conjunta y coordinada, arrojando piedras que aumentaron el riesgo sobre la víctima.

Los tres hombres están imputados por homicidio agravado cometido en el contexto de un espectáculo deportivo, una figura que contempla penas de hasta 34 años de prisión.
En ese sentido, la fiscalía solicitará una condena de entre 30 y 33 años de prisión, mientras que la querella pedirá el máximo.

Además, el magistrado rechazó el planteo de la defensa de Reifenstuel, que había pedido un peritaje oftalmológico argumentando un problema visual que supuestamente le impedía apuntar.
Por último, se resolvió prorrogar por un año más la prisión preventiva de los tres imputados, que seguirán detenidos hasta la realización del juicio, previsto para abril del año próximo. Por su parte, la defensa había solicitado la libertad o un plazo menor de detención, lo cual fue desestimado.