Este martes el presidente de Rosario Central, Ricardo Carloni, declaró en conferencia de prensa que finalmente el pase está caído por decisión institucional.
Declaró: “Tomé la decisión de no llevar adelante la transferencia porque, sinceramente, escuché al socio y al hincha, no solo soy presidente sino también hincha, y queremos disfrutar por mucho tiempo de Buonannote”.
“Tomé la decisión de no llevar adelante la transferencia porque, sinceramente, escuché al socio y al hincha, no solo soy presidente sino también hincha, y queremos disfrutar por mucho tiempo de Buonannote”, comenzó el dirigente, quien quedó como mandamás “canalla” tras la licencia de Rodolfo Di Pollina.
“Fue una decisión difícil de tomar, por la familia, que tenía por delante seguramente un contrato importante desde lo económico y también por Central, que necesita vender. Pero como presidente tengo la obligación de cuidar el patrimonio de nuestro club y, a dos meses de terminar el mandato, no me precia ético vender al jugador de mayor proyección”, agregó.
En esa línea, el dirigente centralista dijo que “consideraba que no era el momento estando cerca de las elecciones”.
Ya en ese tono, resaltó: “Nos achacaron que cuando asumimos la gestión nos dejaban a lo (Giovani) Celso, a (Franco) Cervi, a (Walter) Montoya, jugadores que verdaderamente llegaron a primera en nuestra gestión. Ahora, dejamos a (Facundo) Buonanotte, (Gino) Infantino, Kevin Ortiz, “Chiqui” Frías, un montón de jugadores que representan un patrimonio superior a los 30 millones de dólares”.
Sobre el futuro de Buonanotte, Carloni sostuvo que “debe estar tasado en 20 millones de dólares”.
“Creo que la familia deja de percibir un contrato importante, pero vamos a estar comunicándonos para ofrecerle un contrato que va a ser de los mejores del fútbol profesional. A nosotros nos eligen los socios, nos ponen en el lugar para llevar adelante la gestión y cuando más del 95% no quiere que tomemos una decisión por determinada circunstancia, tenemos que escuchar y ser respetuosos de eso”, concluyó.