El reciente cambio en el sistema de distribución de pañales para afiliados del PAMI sigue generando polémica. Desde el Colegio de Farmacéuticos de Rosario expresaron su preocupación por la implementación del envío domiciliario, tanto por las dificultades logísticas para los adultos mayores como por la calidad del producto que se comenzará a entregar.
Leonardo Jurado, representante del Colegio, señaló que la modalidad puerta a puerta no contempla las limitaciones cotidianas de los jubilados. “Conocemos a los abuelos, sabemos cómo viven. Que alguien les toque timbre para entregar un paquete de pañales genera desconfianza. Y si no están en casa, ¿qué pasa? ¿Se reprograma la entrega, se les pide que vayan a retirarlo a algún centro?”, cuestionó.
En ese sentido, advirtió que los afiliados no tienen forma de trasladar por sus propios medios un paquete de 90 pañales. “Es un bulto pesado, incómodo de transportar. Si se pierde la entrega y se les pide que lo retiren en algún punto de la ciudad, ¿cómo hacen? ¿Toman un colectivo con eso? Es inviable para un jubilado”, enfatizó.
Además del aspecto operativo, desde el Colegio de Farmacéuticos manifestaron inquietud por un posible incremento en los costos del nuevo sistema. Según la información a la que accedieron, el cambio implicaría un aumento del 20% en los gastos de distribución para el PAMI, sin una mejora visible en la calidad del producto.
En relación a esto último, Jurado apuntó a una baja en el estándar de los pañales licitados. “Venimos de un producto de 75 gramos, con una buena absorción, y ahora pasamos a uno de apenas 52 gramos. La diferencia es considerable, y nos preocupa que esto impacte negativamente en el bienestar de los afiliados”, explicó.
Las críticas no se limitaron al ámbito profesional. La diputada nacional Mónica Fein también se sumó al debate, cuestionando el proceso de licitación. “Se dijo que hubo una única empresa oferente, pero eso no es así. Al contrario, hay elementos que me obligan a pensar que hubo un acuerdo previo con la firma adjudicataria”, advirtió.
La implementación del nuevo esquema comenzará en junio y, pese a los reparos, desde el PAMI sostienen que permitirá eliminar intermediarios y mejorar la eficiencia del sistema. Sin embargo, las dudas sobre su ejecución y los efectos en la calidad del servicio persisten.