La situación en Electrolux Rosario se torna cada vez más delicada. La empresa atraviesa un escenario de caída sostenida en las ventas, suspensiones rotativas y competencia desleal de productos importados, lo que pone en riesgo no solo la estabilidad de los trabajadores sino también la continuidad de buena parte del sector de la línea blanca en el país.
Según explicó Antonio Donello, secretario general de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) Rosario, la compañía alcanzó un acuerdo con los empleados para rotar los turnos durante los meses de noviembre y diciembre. “Una parte del personal trabaja 15 días y los otros 15 días queda suspendida, con un acuerdo que garantiza el cobro del 90% del salario de bolsillo. Dentro de todo, logramos que los trabajadores no pierdan tanto, pero la preocupación por lo que viene es enorme”, afirmó.
El dirigente sindical señaló que este tipo de medidas son la antesala de una crisis más profunda si no hay un cambio en el panorama económico. “Hoy hablamos de suspensiones, pero si la situación se agrava, el riesgo de despidos estará sobre la mesa”, advirtió.
Donello destacó que la crisis tiene dos causas principales. En primer lugar, la fuerte caída del poder adquisitivo de los trabajadores, que limita el consumo interno y frena la demanda de electrodomésticos. “Nuestros compañeros se endeudan para comer, no van a endeudarse para comprar una heladera o un lavarropas. El mercado interno se está desmoronando”, sostuvo.
En segundo lugar, apuntó contra la liberación de importaciones y la reducción de aranceles, que afectaron gravemente a la producción nacional. “El Gobierno trajo productos hechos afuera, liberó las tasas a la importación y eso nos golpeó de lleno. Se está generando trabajo en otros países mientras nuestras fábricas están a media máquina”, denunció.
La industria metalúrgica de Rosario, históricamente vinculada a la producción de línea blanca, enfrenta así un panorama de incertidumbre. “Hoy no podemos competir con los productos importados. Los costos internos son altos, los salarios se achataron y no tenemos paritarias actualizadas. Todo eso pone en riesgo cientos de puestos de trabajo”, remarcó Donello.
Desde la UOM adelantaron que seguirán monitoreando la situación y solicitarán reuniones con autoridades nacionales y provinciales para defender la producción local. “Lo que necesitamos es un plan industrial serio, con reglas claras, protección del empleo argentino y medidas concretas para sostener la demanda. Si no se actúa pronto, el daño será difícil de revertir”, concluyó el gremialista.






















