No pasaron 15 días de su estreno que desde FX anunciaron con bombos y platillos la renovación de la serie El Oso para una quinta temporada, sin dar más detalles a propósito de la misma.
El crecimiento de la serie con cada temporada es excelente, sin lugar a dudas la apuesta inicial ya tenía todos los condimentos para convertirse en una serie de culto, pero así como en sus platos, la práctica y el tiempo han logrado perfeccionar sus recetas para que cada capítulo sea una obra de arte.
¿Cuál es la receta del éxito de El Oso?
Hay varios ingredientes que suman al plato principal, creo que se puede comenzar por la creación de los personajes y el desarrollo de los mismos. Así como cada vez que puedo recomiendo This is Us de la misma franquicia, en donde uno de sus detalles es la riqueza de personajes principales, pero también secundarios, acá pasa exactamente lo mismo. Además de Carmy (encarnado de forma brillante por Jeremy Allen White) hay prácticamente una historia entrañable por dilucidar en cada personaje que rodea a la familia Berzatto.
Además de esto, el ritmo frenético para contar las historias y el zig zag que realizan cuando aceleran a fondo con mucha pero mucha velocidad en imágenes, diálogos que se superponen hasta el hartazgo, ruido ambiente. música incidental para llevar de repente con un quiebre… a una pausa, y quizás a una música que nos acompañe a una reflexión. Del caos a la paz en un par de minutos.
Pasos de comedia y personajes increíbles que van apareciendo casi como caricaturas de si mismos, pero sin perder nunca el registro de realidad en la que trabaja la serie, vemos también como la comida, la preparación, las relaciones y los lazos familiares y de amigos se cruzan como se cruzan los ingredientes y condimentos para la preparación, emplatado y servido de un plato excelente. De lo más popular de una ventana de sándwich, al extremo lujo de un restaurante de estrellas Michelin. Todo confluye en El Oso de manera caótica y armónica al mismo tiempo.
Con sus cuatro temporadas disponibles en la plataforma de Disney, la serie cuenta con capítulos de un promedio de 35 a 45 minutos, con una sana costumbre de incluir un capítulo bisagra de una hora de duración, como la increíble cena navideña en donde aparecen como actores invitados: Jamie Lee Curtis (True Lies) y Bob Odenkirk (Better Call Saul). Justamente otro de los rasgos de la serie es que aparecen muchos artistas invitados con una pasadita por el set como para decir simplemente “yo estuve ahí”.
Absolutamente recomendada, The Bear, El Oso en sus cuatro temporadas, su quinta en marcha y sin lugar a dudas, un ingreso al salón principal de las series de culto, merito mayor, por generarse en una época de consumos muy livianos. (por si le faltaba algo, en la banda de sonido escucharás a Pearl Jam, R.E.M, Rolling Stones entre otros). ¡Brillante!
