En los últimos días, se registró una preocupante serie de asaltos contra conductores de transporte por aplicaciones móviles en Rosario. Entre el fin de semana y el martes, al menos tres trabajadores de las plataformas Didi y Uber fueron víctimas de robos bajo una misma modalidad: pasajeros que simulan ser usuarios habituales, pero que en medio del trayecto revelan sus verdaderas intenciones.
El último hecho ocurrió el martes, cuando un conductor de Didi fue abordado por un supuesto pasajero en la zona de Garibaldi al 3700. El destino marcado era Cagancha al 3400. Al llegar al lugar indicado, el hombre que viajaba en el asiento trasero sacó un arma de fuego y un cuchillo, y amenazó al chofer para robarle el celular. El delincuente escapó corriendo, pero más tarde fue identificado y demorado por la policía. Se trata de Víctor Antonio A., de 32 años, quien habría solicitado el viaje junto a otro cómplice que ejecutó el robo.
Desde la Unidad Regional II confirmaron que el pedido formal de viaje fue clave para rastrear a uno de los sospechosos y avanzar en su detención, aunque la investigación continúa para esclarecer su participación y la de otros involucrados.
Durante el fin de semana se reportaron otros dos casos con características similares, esta vez contra choferes de Uber. El primero sucedió el sábado. Un conductor de 37 años fue asaltado durante un viaje y obligado a abandonar su vehículo. El auto fue recuperado más tarde en la intersección de Magallanes y Pasaje 1821.
El segundo episodio ocurrió el domingo, cuando tres individuos abordaron un Peugeot 208 en la zona de Nicanor Frutos al 3800. A punta de pistola redujeron al chofer y se llevaron el vehículo, que luego fue hallado abandonado en Doctor Riva y Pasaje 1892.
A estos casos se suman otros delitos cometidos a bordo de autos de aplicaciones, aunque con particularidades diferentes. En algunos, los pasajeros fueron sorprendidos por la policía portando armas de fuego. El 29 de mayo, efectivos del Comando Radioeléctrico interceptaron un Ford Focus en Provincias Unidas y Rivero. En su interior viajaban dos menores de edad, de 15 y 17 años, junto a un chofer de Didi. Durante la requisa, hallaron un revólver calibre .22 con seis municiones y dos vainas servidas en la riñonera de la adolescente.
Otro episodio, con el conductor también bajo sospecha, ocurrió el 4 de marzo. En Junín y Perú, los agentes inspeccionaron un Fiat Palio detenido en una esquina. Allí encontraron a un hombre de 30 años que se presentó como chofer de Didi, acompañado por tres menores: dos varones y una mujer. Uno de los adolescentes, de 15 años, tenía una pistola escondida entre sus prendas.
La reiteración de hechos y la participación de jóvenes en estas situaciones vuelve a encender las alertas sobre la seguridad en este tipo de servicios. Mientras las plataformas continúan expandiéndose, muchos conductores aseguran sentirse cada vez más vulnerables en su tarea diaria.
