Luego de más de seis décadas y varios intentos fallidos, la provincia de Santa Fe logró reformar su Constitución. Este miércoles, la Convención Constituyente aprobó el nuevo texto con 52 votos a favor y 17 en contra, lo que equivale al 75,4% del cuerpo. El viernes será jurada por los convencionales y las autoridades de los tres poderes del Estado.
La nueva Carta Magna introduce cambios profundos en el sistema político e institucional: habilita la reelección del gobernador y vice por un período, limita mandatos legislativos, elimina la mayoría automática en Diputados, otorga autonomía a los municipios, consagra nuevos derechos y descentraliza la Justicia con la autarquía del Ministerio Público de la Acusación. También establece límites a la permanencia de jueces de la Corte y mecanismos renovados para designar y enjuiciar magistrados.
El debate se extendió durante horas, con discursos cargados de emoción y cruces políticos. El presidente de la Convención, Felipe Michlig, celebró que el 93% de los artículos fueran votados por más de dos tercios, mientras que desde Unidos, Fabián Bastía definió la reforma como “la base para el fortalecimiento institucional y el fin de los privilegios”. Hubo también críticas: desde La Libertad Avanza, Nicolás Mayoraz cuestionó que no se avanzara hacia una legislatura unicameral, y Amalia Granata calificó el proceso de “farsa”.