Tras tres meses de cierre por obras, el Aeropuerto Internacional Rosario se prepara para su reinauguración con un evento abierto al público que combinará acto institucional, exhibiciones aéreas, visitas guiadas y un recital al aire libre. La Provincia confirmó que el festejo será el sábado 27 de diciembre y tendrá como atractivo central el sorteo de pasajes aéreos internacionales entre quienes asistan y se inscriban en el lugar.
La terminal de Fisherton, que en agosto cumplió 85 años, bajó sus persianas a fines de septiembre para encarar la remodelación más importante de su historia. Antes del regreso pleno de la actividad, el gobierno santafesino decidió “estrenar” las mejoras con una jornada de celebración pensada para que vecinos y viajeros conozcan las nuevas instalaciones.

Según el cronograma oficial, el ingreso del público se habilitará a las 18. Habrá una zona preparada para estacionar y recorrer el predio con entrada libre, además de puestos gastronómicos con food trucks. Una hora más tarde se prevé el arribo de autoridades y el inicio de una exhibición con vuelos acrobáticos y la participación de paracaidistas en el área lindera entre Rosario y Funes.
El acto protocolar fue programado para las 19.30. Luego llegará el tramo musical: primero se presentará Sofi Gazzaniga y más tarde subirá al escenario Vilma Palma e Vampiros, en un show que, adelantaron, se extenderá por más de una hora. Como cierre, se realizará el sorteo de pasajes.
Además del espectáculo, la reapertura incluirá recorridas guiadas para ver la nueva pista y las mejoras operativas: entre ellas, la incorporación de dos mangas y la adecuación que le permite alcanzar categoría 3. La convocatoria ganó expectativa en un contexto de expansión de rutas internacionales anunciadas para 2026.
En cuanto a la obra, el ministro de Desarrollo Productivo, Gustavo Puccini, sostuvo que la inversión rondó los 150 millones de dólares y que la Provincia asumió con fondos propios un compromiso que, según afirmó, debía financiarse en parte con aportes nacionales. El proyecto incluyó la repavimentación integral de 3.000 metros de pista, un balizamiento LED de última generación, escaleras mecánicas y una ampliación flexible de la terminal sobre más de 10.500 metros cuadrados, con el objetivo de reposicionar a Rosario como alternativa operativa y volver a ponerla en el radar de más aerolíneas.



















