La justicia ordenó la prisión preventiva para los dos delincuentes, padre e hijo, que balearon a la pareja en Arroyito el pasado domingo para sustraerle el auto. El más jóven fue detenido el día martes. Por su parte el padre, Miguel Arce, regresó a la cárcel ya que delinquió durante una salida transitoria.
El fiscal Alejandro Ferlazzo les imputó que “para lograr su cometido (el robo) se detuvieron cerca del vehículo estacionado frente al domicilio de José Ingenieros 1800 a la espera del descenso de la familia. Ariel Arce le hace entrega a su padre Miguel Arce de un arma de fuego, con la que éste amedrenta a las víctimas”, por Rubén Guzmán y Patricia Rigatuso, quienes estaban con su hijo de 13 años. Ante esto, Miguel Arce “se trenzó en lucha con Guzmán, y posteriormente se retiró del lugar en forma pedestre. A los segundos, regresó corriendo hacia donde se encontraban ambos, y para procurar impunidad (por el hecho de robo) le efectuó disparos con el arma de fuego para matarlos, impactándole a Guzmán en la zona abdominal y a Rigatuso en el muslo de la pierna izquierda”.
Los hombres quedaron filmados por la cámara de seguridad de una casa. En el video se puede a padre e hijo, en silla de ruedas, efectuando el robo y a Miguel Arce disparando a la víctima.
Este viernes, los socios del Club Náutico Sportivo Avellaneda convocaron a un abrazo solidario en el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (HECA) a las 19 horas. “El club es una familia y Rubén y Pata son parte de ella. Hoy nos toca de cerca lo que les pasó. Tenemos que pensar que nos puede pasar a cualquiera. Hoy, la preocupación por el otro hoy tiene que ser prioridad. Invitamos a todos los que quieran sumarse”, manifestó Gustavo Montemarini, secretario del Club.