En menos de dos años, la Justicia rechazó más de 700 hábeas corpus impulsados por narcos que buscan recuperar poder desde las prisiones.
“Antes de esta ley, los presos más peligrosos vivían como querían dentro de la cárcel, y a los agentes penitenciarios se les hacía casi imposible mantener el control”, explicó María Florencia Blotta, subsecretaria de Relaciones con el Poder Judicial.
Y añadió: “No podemos relajarnos, porque esto no está terminado. Por eso necesitamos que Gisela Scaglia esté en el Congreso: para consolidar las leyes que hoy defienden a Santa Fe, pero que aún no existen a nivel nacional”.
En apenas 20 meses, el equipo jurídico del Ministerio de Justicia y Seguridad obtuvo más de 700 fallos favorables ante hábeas corpus interpuestos por narcotraficantes y sus defensores. Cada resolución, señalan desde la cartera, “es un ladrillo más en el muro que separa los pabellones de las calles”.
“En Rosario y en otras ciudades de la provincia, los nombres que antes daban las órdenes para matar hoy están sometidos a un sistema que los acorrala”, apuntaron fuentes del Ministerio.