El presidente de la Nación, Javier Milei, se refirió a la reciente sesión del Senado en la que se expulsó al ex legislador Edgardo Kueider, detenido en Paraguay junto a su secretaria por intentar ingresar 200 mil dólares sin declarar. En su declaración, Milei no solo abordó el caso de Kueider, sino que también hizo un fuerte cuestionamiento sobre la validez de la sesión, señalando la participación de la vicepresidenta, Victoria Villarruel, quien presidió la sesión mientras se encontraba en Italia.
Milei apuntó directamente contra Villarruel, al considerar que su presencia en esa sesión violaba la separación de poderes. “Estaba informada 48 horas antes de la sesión”, explicó el mandatario, refiriéndose a la notificación que la vicepresidenta recibió sobre la necesidad de hacerse cargo del Ejecutivo durante el viaje de la presidenta del Senado, Cristina Fernández de Kirchner.
El presidente detalló que, según la normativa vigente, al salir del país, “automáticamente se produjo la acefalía” y Villarruel pasó a ocupar el cargo de presidenta interina. “Si preside la sesión en el Congreso, está trabajando en el Legislativo, pero al mismo tiempo es Presidente de la Nación interina. Eso violenta la división de poderes”, sostuvo Milei.
El mandatario fue enfático al afirmar que, bajo estas circunstancias, “la sesión es inválida”, ya que, según él, la actuación de Villarruel en esa instancia compromete la independencia de los poderes del Estado. Además, recordó que la vicepresidenta había sido debidamente informada de su nuevo rol y las implicaciones de ejercer funciones tanto en el Ejecutivo como en el Legislativo de manera simultánea.