La Unión Obrera Metalúrgica (UOM) suspendió este martes por la tarde el paro nacional, previsto para este miércoles en plantas de todo el país en demanda de mejoras salariales, tras el dictado de conciliación obligatoria dispuesto por el gobierno de Javier Milei. La medida de fuerza iba a impactar fuerte en las fábricas de Rosario y la región.
El gremio resolvió acatar la medida oficial y frenó el plan de lucha definido por el Congreso Nacional de Delegados reunido semanas atrás en Mar del Plata. De esta manera, el sindicato aguardará la convocatoria a una nueva audiencia de negociación con los empresarios.
La conciliación obligatoria tendrá vigencia desde las 0 horas del miércoles 7 y se extenderá durante 15 días, según lo dispuesto por la Dirección Nacional de Relaciones del Trabajo de la Secretaría de Trabajo de la Nación.
La medida de fuerza iba a significar el inicio de un plan de acción con protestas escalonadas que culminaría con un paro de actividades por 72 horas.
Ahora se abre un nuevo escenario de diálogo entre el sindicato y los empresarios, en el marco de un complejo presente para el sector con suspensiones, cierres y despidos frente a una brutal caída de la actividad y la amenaza importadora más vigente que nunca.