Alejandra “Locomotora” Oliveras cumple 11 días internada en la unidad de terapia intensiva del hospital José María Cullen de Santa Fe, luego del ACV isquémico que la afectó el 14 de julio. El último parte médico confirmó que se le practicó una traqueotomía percutánea sin complicaciones, lo que permitió reducir la sedación para evaluar con mayor precisión las secuelas neurológicas.
El documento oficial señala que Oliveras permanece hemodinámicamente estable, con asistencia respiratoria y respuesta motora en el hemicuerpo derecho. Sin embargo, el pronóstico sigue siendo reservado. La deportista, de 47 años, ingresó al hospital con parálisis en el lado izquierdo y dificultades para hablar. Dos días después sufrió una complicación grave por hipertensión intracraneal, que obligó a una cirugía de urgencia. Desde entonces permanece sedada.
“Su riesgo de vida sigue siendo alto y, en caso de superar esta etapa, las secuelas neurológicas serán inevitables”, indicó Néstor Carrizo, jefe de terapia intensiva. El médico explicó que el daño cerebral afecta el hemisferio izquierdo, responsable del lenguaje y de la movilidad del lado derecho del cuerpo. “Nuestro objetivo es preservar las zonas del cerebro no afectadas y mantener su estabilidad”, agregó.
El ACV fue provocado por un coágulo que obstruyó la arteria silviana, lo que interrumpió el flujo sanguíneo en un área crítica. Carrizo detalló que este tipo de eventos pueden originarse en coágulos formados en el corazón o en arterias principales, que luego migran y bloquean vasos menores.
Su hermano, Jesús Oliveras, confirmó el difícil panorama: “Alejandra está en estado crítico y no puede estar sin respirador. Tiene daño en el tronco cerebral, que controla funciones vitales. Nos damos fuerzas entre los hijos y la familia para acompañarla”.
“Locomotora” Oliveras es una de las boxeadoras más reconocidas del país, con títulos mundiales en cuatro categorías. En los últimos años se volcó a la política y al trabajo social, además de difundir mensajes de vida saludable. Su situación conmociona al deporte y a sus seguidores, que esperan señales de mejoría en medio de un cuadro complejo.
El equipo médico continuará evaluando su evolución día a día.