Los mercados reaccionaron con fuertes subas este lunes impulsados por el nuevo escenario político tras las elecciones legislativas. En la Bolsa porteña, el índice S&P Merval trepó alrededor de un 20% en la apertura de la semana y alcanzó un nuevo récord en pesos cercano a los 2,48 millones de puntos.
El entusiasmo inversor también se replicó en el exterior. Los papeles argentinos que cotizan en Wall Street escalaron de manera destacada: algunos ADR del sector financiero y energético avanzaron entre 30% y 50%, posicionándose entre los activos de mejor performance global en la jornada.
El sector bancario fue uno de los principales motores del rally: acciones como las de Banco Supervielle y Grupo Financiero Galicia registraron subas muy marcadas. En el rubro energético se destacaron YPF, con un ascenso que rondó el 35%, y Vista, que también operó con ganancias superiores al 30%.
El resultado electoral alimentó expectativas de mayor estabilidad política, posibilidad de reformas económicas y un clima más favorable para la inversión. Operadores del mercado señalaron que la magnitud del movimiento refleja un realineamiento de portafolios frente al cambio de expectativas y no simplemente una corrección aislada.
Sin embargo, advierten que buena parte de estas alzas se dio con un volumen de negocios todavía moderado. Para sostener la tendencia, será clave observar cómo se acomodan los bonos argentinos y la evolución del dólar en los próximos días, sobre todo en un contexto en el que el financiamiento externo vuelve a colocarse en el centro del análisis.
En ese marco, economistas recuerdan que la Argentina enfrenta vencimientos de deuda en moneda extranjera por casi 34 mil millones de dólares hasta 2027. La manera en que se reestructure esta agenda financiera —ya sea con apoyo internacional o mediante recursos propios— será determinante para la evolución del riesgo país y la confianza de los inversores.
La euforia bursátil comenzó a percibirse desde el viernes, cuando los primeros datos electorales empezaron a perfilar un resultado favorable al Gobierno. La contundencia de la reacción de hoy marca uno de los saltos más pronunciados del mercado argentino en un contexto electoral desde hace varios años.
El desafío, coinciden analistas, será transformar este shock de confianza de corto plazo en señales concretas de crecimiento, mejora fiscal y estabilidad macroeconómica. Por ahora, los activos localmente volvieron a brillar y los inversores celebran el giro de expectativas.


















