El proyecto anunciado por el presidente Javier Milei para permitir actividades mineras en áreas cercanas a los glaciares generó un fuerte rechazo de organizaciones ambientales. Desde Greenpeace advirtieron que la medida podría comprometer las principales reservas de agua del país. “Sin glaciares no hay agua, y sin agua no hay futuro”, señaló Agostina Rossi Serra, especialista en biodiversidad.
Milei sostuvo que la iniciativa busca que las provincias definan qué zonas podrán habilitar para la explotación minera y defendió que el sector podría generar hasta un millón de empleos. También criticó a las organizaciones que se oponen y remarcó que la actividad representa oportunidades de inversión para el país. La Ley de Glaciares, sancionada en 2010 y ratificada por la Corte Suprema en 2019, protege el ambiente glaciar y periglacial como reservas hídricas estratégicas.
Organizaciones como FARN recordaron que en Argentina existen más de 16.900 cuerpos de hielo y que el retroceso del 17% registrado en algunos sectores de la Cordillera evidencia un escenario de alta vulnerabilidad. Advirtieron que habilitar actividades mineras en esas zonas podría afectar la provisión de agua y generar impactos ambientales y sociales de gran escala.





















