La Provincia, a través de la Secretaría de Derechos Humanos, logró reconstruir la identidad de cinco hermanos que llevaban 25 años separados. Se trata de la historia de Adán, Graciela, Norma, Carlos y Marcelo; quienes atravesaron una situación familiar en su infancia y, tras una denuncia al Juzgado de Menores en el 2000, dividieron sus caminos en Santa Fe.
Por entonces, Adán, de 8 años, quedó a cargo de un tío, mientras que Graciela, de 7, Norma, de 5, Carlos, de 4, y Marcelo, de 2, fueron llevados a la Casa Cuna de la capital provincial. Tiempo más tarde, Graciela y Norma pasaron a ser criadas por familiares, mientras que Carlos y Marcelo fueron dados en adopción.

Décadas más tarde, el hermano mayor decidió buscar a sus familiares y se contactó con la Secretaría de Derechos Humanos santafesina, con una foto de los cinco hermanos como prueba. La provincia investigó la localización de partidas inmovilizadas, domicilios actuales, citaciones, entrevistas y el acceso al expediente de adopción. Finalmente, Adán, Graciela, Norma y Carlos pudieron localizarse.
El secretario de Derechos Humanos, Emilio Jatón, brindó declaraciones al respecto y mencionó: “Tenemos como función primordial la defensa del derecho a la identidad biológica, brindando acompañamiento y asesoramiento a quienes buscan conocer sus orígenes o tienen interrogantes sobre su identidad”.