“¿Quién podía pensar que estaba ahí? No había mejor lugar para esconderse que ser uno más”, confesó uno de los investigadores al periodista de policiales, Rodrigo Miró, sobre la reciente detención del prófugo Waldo Bilbao, por quien pesaba una recompensa de 50 millones de pesos y era el tercero en la lista de los más buscados. El arresto se efectuó este viernes por la noche en uno de los departamentos de “El Palomar”, un clásico edificio de viviendas del barrio Martin, ubicado a dos cuadras del Monumento a la Bandera.
La detención la llevó adelante la Unidad de Acciones Especiales de la Provincia de Santa Fe, dependiente de la Central de Inteligencia y Operaciones Especiales (CIOPE), conjuntamente con personal de las Tropas de Operaciones Especiales (TOE) de la Policía de Santa Fe, en un departamento de Colón al 1200. Al momento del ingreso del personal policial durante el allanamiento, el requerido intentó ocultarse en un habitáculo de reducidas dimensiones pero inmediatamente fue reducido.

La captura de Bilbao se produjo luego de minuciosas investigaciones a partir de una causa que lleva adelante el Juzgado Federal Nro. 3 de PROCUNAR, con pedido de captura de alto perfil. El individio era buscado intensamente por diversas fuerzas y formaba parte de los prófugos de alto perfil con prioridad de captura para la Provincia de Santa Fe.
De acuerdo a las investigaciones, el sujeto formaba parte de una organización comandada por su hermano Brian, quien sigue prófugo. Waldo habría sido el encargado de manejar parte del dinero obtenido del narcotráfico para lavarlo en distintas actividades, de acuerdo a la investigación federal.