Franco Bartolacci, rector de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), volvió a manifestar su preocupación por la situación financiera de la institución y del sistema universitario público en general. Según detalló, la UNR atraviesa un cuadro de deterioro que impacta directamente en su funcionamiento, en la calidad académica y en las condiciones laborales de su comunidad.
“La situación de la Universidad Nacional de Rosario no es distinta a la del resto de las universidades públicas del país. Estamos transitando el segundo año consecutivo con presupuesto prorrogado, sin actualización real frente a la inflación acumulada desde noviembre de 2023”, explicó Bartolacci a VersiónRosario. Esa brecha entre los fondos asignados y los costos actuales, remarcó, dificulta seriamente la operatividad cotidiana de la casa de estudios.
Uno de los aspectos más críticos señalados por el rector es el salarial. “Hoy prácticamente el 80% de la docencia y la no docencia universitaria percibe ingresos por debajo de la línea de pobreza. Eso no solo afecta a cada trabajador, sino que deteriora de forma progresiva las condiciones de trabajo de toda la institución”, aseguró.
El impacto ya se refleja en la pérdida de recursos humanos. Solo en el primer semestre de 2025 se registraron alrededor de 100 renuncias, número similar al total de bajas ocurridas durante todo 2024. Bartolacci advirtió que, cuando no se trata de desvinculaciones, muchos docentes se ven forzados al pluriempleo, lo que reduce su dedicación y compromiso con la vida universitaria.
El rector también encendió una señal de alarma sobre el sistema científico nacional, cuya situación calificó de aún más grave. “Prácticamente están cortadas todas las líneas de financiamiento. Se están perdiendo investigadores formados, se interrumpen proyectos, y lo que se pierde no se recupera con un acto administrativo. Son años de formación que se van”, lamentó.
Con este diagnóstico, Bartolacci instó a las autoridades nacionales a revertir el rumbo. “Lo hemos dicho con claridad: la universidad pública necesita previsibilidad, financiamiento adecuado y condiciones dignas para seguir cumpliendo su rol”, concluyó.