Carolina Labayrú, secretaria de Control y Convivencia, afirmó que la llegada del año nuevo no tuvo inconvenientes ni conflictos. Se destacó el balance positivo, similar al de Navidad.
Respecto a los test de alcoholemia hubo cuatro casos positivos, de los cuales la graduación más alta fue de 0.81. Las dos fiestas habilitadas por la municipalidad en la zona norte de la ciudad reunieron cerca de seis mil personas y se organizaron de manera muy respetuosa. Además hubo controles en dos boliches que abrieron sus puertas.
Los miembros de Control y Convivencia estuvieron presentes en algunas fiestas callejeras: estas se localizaron en el Parque de las Colectividades, Ayacucho y Rueda, y en Perez Bulnes y Brasil. Labayrú se refirió optimista acerca de los festejos respetuosos en dichas convocatorias, tanto con los agentes como con los vecinos de la zona.