Antón Gandoy es un veterinario rural que disfruta de su trabajo y ama a los animales, pero siempre desde esa concepción más terrenal, completamente alejada de las costumbres urbanas que comienzan a humanizar a los hoy llamados animales de compañía.
Sin embargo, entre crisis y algo de tacaño, las pagas rurales comienzan a ser con productos de campo y para poder pagar las cuentas, Gandoy debe comenzar a trabajar en una veterinaria del centro “Kawanda” que para él es mucho más parecida a un supermercado.

El tratar de vender productos, el conocer productos que no entiende para que quiere un animal y el empezar a tratar casos en donde la consultas son “mi perro ya no quiere mirar películas conmigo” o “queremos que sea menos oloroso” comienza a complicar la cotidianeidad del veterinario que necesita cosechar caritas felices en cada consulta para poder mantener su trabajo.
Si a esto sumamos la relación con Uxia, la gerenta del local y su sobrina, que de alguna manera empieza a entenderse y desentenderse al mismo tiempo cada vez más con su tío y su manera de concebir la veterinaria y los animales.

Serie ideal para maratonear el fin de semana largo, con mucha comedia y un ritmo que hace que cada capítulo de 30 minutos pase volando. Luis Zahera conocido en estos pagos especialmente por la serie Entrevías, compone un personaje entrañable con similitud en cuanto a conflicto con Eliseo el portero de El Encargado que interpreta Francella, o el director del museo de Oscar Martínez en la serie Bellas Artes, mostrando lo complicado que se vuelve el mundo para los tradicionalistas, cuando las cosas empiezan a llamarse de otra manera o “los tiempos cambian”.