Una mujer residente en Los Ángeles fue imputada por la Justicia federal por su presunta participación en la explotación durante 22 años de una joven que, en 2003, fue captada en Corrientes con la promesa de estudiar en Rosario. La víctima -hoy de 37 años- fue rescatada por la Policía Federal el 2 de octubre en una vivienda de Montevideo al 100, donde realizaba tareas domésticas sin remuneración, descanso ni vínculos sociales.
La acusación fue presentada por la fiscal Adriana Saccone y las coadyuvantes María Virginia Sosa y Soledad García, quienes pidieron la detención y extradición de E.S.S. El juez Román Lanzón rechazó el planteo y dispuso medidas alternativas: fijación de domicilio, firma mensual en un consulado y prohibición de contacto con la víctima. También negó el sobreseimiento solicitado por la defensa.
Según la investigación, desde 2022 la imputada continuó la explotación desde Estados Unidos mediante 16 cámaras de seguridad y un celular con el que controlaba las tareas, tras asumir el manejo de la casa por el deterioro de salud de su madre -también investigada-
. La fiscalía calificó el caso como un delito “de ejecución continuada” durante más de dos décadas. La madre de la imputada será evaluada médicamente para determinar si puede afrontar un proceso penal.




















